sábado, 9 de marzo de 2024

Educadas para brillar

Por la educación que he recibido, no siempre me he sentido importante o incluso inteligente. Me he acostumbrado a crecer con la duda sobre mi propia competencia. Así crecíamos de aquella, pensando que teníamos poco valor, especialmente comparadas con ellos, que siempre fueron los reyes del mambo.


De hecho, muchas veces, todavía lo pienso. Esa duda, es aprendida. Es que crecemos habituándonos a ser inferiores. Pero esta semana ha sido como un chute de adrenalina por algunos de los piropazos que me ha ofrecido mi alumnado.


Una niña me ha dicho que consigo todo lo que quiero y me ha dejado impactada. He tenido que analizarlo, pero tiene razón. Pude sentir que es verdad que alcanzo lo que deseo porque trabajo en ello e inmediatamente le he contestado: ¡igual que tú! Ella todavía no lo cree, pero lo logrará.


Otra alumna me ha dicho que le gustan mis clases porque son diferentes cada día. Ya te digo que tengo que procesar lo mucho que ellos valoran cosas que yo considero cotidianas. Le he contestado que ella también vivirá una vida igual de disparatada que la mía, porque somos como dos gotas de agua. Ella todavía no lo cree, pero lo logrará.


Me han dado las gracias por mi trabajo y yo les doy las gracias a ellas, a quienes educo para que se coman el mundo y nunca duden de toda su valía. Para que no se sorprendan de lo increíbles que son, de su inteligencia, de sus habilidades y de sus talentos.


Me han felicitado, les he contestado que es duro ser mujer y que te valoren en muchas circunstancias. Ellas ya lo saben, por algo será...


Hacen falta tantos 8M como estrellas en el cielo hasta que les devolvamos a las niñas toda su confianza, para que las mujeres del hoy no tengan que dudar más.

También te gustará

0 comments

Suscríbete a la Newsletter

Recibe mis publicaciones en tu email y no te pierdas nada.

CHARLA MADRESFÉRICA: REEDUCAR EN EL JUEGO

Estoy en madresfera

CHARLA EDUCATIVA SOBRE PATIOS INCLUSIVOS